Texto previo Nº V

el texto que viene a continuación es fruto de una serie de sucesos hermosos y azarosos en un viaje a Villeta realizado con los primeros pitufos en enero (¿o febrero?) de este año. Recuerdo que estábamos en el río y se me acercó Jeimmy. Me dijo que abriera la mano y me dio una mariposa muerta, sus alas formaban una V.
Me dijo que era una V de Vendeta (¡Joder!y que por esos días estaba tan eufórico en mi alma por esa historia de V).
En relaida le temoa los bichos, vivos o muertos, pero mis sentidos llevaron en mi mano aquel resto de mariposa, aquel signo etereo, me concentré en mi vendetta y la dejé fluir por los rios metafísicos.

Posteriormente el escrito lo realizamos los Tres Pitufos iniciales, dos en presencia, uno por invocación, y emergió a la realidad por esta mano, en una reunioncilla de febrero...

Vendetta

Una mariposa busca en mi mano su carroza fúnebre. En otro plano, una voz de dulzaina me explica el misterio que contiene aqeulla primal epifanía
“toma, una V de Vendetta …”
¡Cielos! Ese cromático cadáver cuyo vuelo cinco minutos antes generaba fluctuaciones caóticas que solo el futuro conocerá ahora forma una V (Victoria? Vórtice? Vida? Voracidad? V....?) Vendetta.
...
Considero que esta carroza fúnebre debe dejar fluir la mariposa
Considero que esta mano deje fluir la vendetta

En un río y con la lejana y distraída compañía de mis otros combatientes, una hoja seca se vuelve el hogar definitivo de la mariposa vagarosa… dejo que la vendetta busque en mí su objeto fatal... su victima...

... el tiempo trae... el río trajo... ahora ha llegado la mariposa vagarosa sobre estos tres exiliados que.. ding dong